33 primaveras

Mañana es el día de la primavera, y tengo la idea de que saldrá sol porque -según yo- todos los 23 de septiembre sale el sol.

Pero al margen de que salga o no la pelota amarilla -que nunca tan bella como cuando está naranja-, los pajaros canten o no más fuerte o el día se llene de colores pasteles, para mí la primavera no significa una estación de año (aceptémoslo, en Lima hay verano, hay invierno, pero el otoño y la primavera siempre han tenido problemas serios de personalidad) , a mi la primavera me remite más a una esecena que no he hecho más que imaginármela pues nunca me la han contado. Uno pedazos e historias ajenas, y me imagino a una Pati quinceañera llegando con una falda rosada y una blusa blanca al baile de la Primavera del colegio, se ha maquillado muy poco, lo que ha logrado resaltar más su súper sonrisa, la que se vuelve más súper y más sonrisa al ver entrar por la puerta al "mono" Carlos. Él está en quinto de media, y no está pensando en que es su último baile de primavera y tiene que pegarse la tranca con sus amigos. Él tiene otra cosa en mente: formalizar lo que ya se veía venir, a Carlos le gusta Pati y hoy se lo quiere decir.

La invitará a su prom, le dirá cuánto la extrañó durante el viaje de prom, y le pedirá que sea su enamorada. Que no le importa si tiene 8 hermanos ladillas y un papá súper posero, él le dirá que la quiere con él y la quiere en su vida, se lo dirá como le dijo hoy, cuando desayunábamos en la mañana. Mi papá a mi mamá:
"Amorcito, mañana cumplimos 33 años de enamorados"