Mi bolita me preparaba huevo frito con papas fritas (siempre amarillas) en el desayuno.
Mi mamá me perseguía con cucharitas de limón y miel.
Jugaba al avioncito con la sopa, y entre cuchara y cuchara, daba una vuelta alrededor de la mesa.
Esperaba el verano para los pejerreyes fritos con arroz.
Me gustaba la gelatina.
(Y no le tenía miedo a los carbohidratos, al azúcar, a la mucha sal, ni al hombre de la bolsa)
hey, me tope con tu blog...
ReplyDeletepejerreyes fritos con arroz
Es muy bueno
Saludos...
Curioso blog.
ReplyDeleteY ya se me antojaron papas fritas x]
tiempos aquellos en que el mayor problema era no querer tomar la sopa...
ReplyDeleteNos leemos.
Desayunar pan con tortilla y café está entre las cosas más ricas.
ReplyDeleteCuando era chica comía cuanto quería, luego por pretensión me puse restricciones. Ahora digamos que las restricciones me la ponen los precios que no puedo pagar. Cosas de la vida.